Los vínculos entre España e Irlanda son ancestrales y se confirman en nuestro tiempo por la genética. Sin embargo, en esta ocasión nos centramos en la época de la Monarquía Hispánica, siendo las armas (especialmente desde 1580 hasta 1818) un gran filtro para que muchos irlandeses se estableciesen a lo largo y ancho del mundo hispánico como su tierra prometida, llegando a conseguir altos puestos de mando tanto en el ejército como en la política. De hecho, los irlandeses constituyen una de las migraciones más significativas de nuestra historia moderna (o incluso contemporánea) y poca importancia le damos en nuestro imaginario colectivo.
Con todo, parece que algo cambia al respecto porque desde la misma Irlanda, cada vez son más los interesados en recuperar esta memoria. Los Tercios de Flandes (con la correspondiente Gran Armada), la Guerra de Sucesión Española, la causa jacobita, los dragones de cuera… Hasta las independencias y el batallón de San Patricio sellan toda una historia compartida que desde aquí reivindicamos.
A ver si los Dropkick Murphys se inspiran y componen temazos al respecto…
¡Pasen y vean!
