Estoicismo en tiempos del covid-19

Como ya todos sabemos, actualmente nos enfrentamos a la pandemia de Covid19,  y como es de esperarse ya se han dicho un montón de tonterías sobre el virus, muchas de éstas han sido dichas por nuestros gobernantes, ciertamente éste es el caso si vives en México, donde el presidente ha afirmado que el virus no es razón para preocuparse y que todo está bajo control, pero es precisamente éste uno de los puntos más importantes en la filosofía estoica, entender que no todo está bajo control, no está bajo nuestro control el infectarnos con el virus o cuánto éste se expande por ejemplo. El saber en toda circunstancia qué está bajo nuestro control e identificar aquello que no lo está, como bien nos lo dice Epicteto en su Enquiridion, ha sido un pilar en el desarrollo de las civilizaciones.

Para saber qué podemos controlar y qué no, en el caso del covid19, es importante considerar la física del virus (Aquí es importante recordar que para los estoicos «física» se refiere no sólo a la física moderna, sino a un gran planteamiento para la comprensión de mundo, en el que que se incluyen tanto las ciencias naturales como la metafísica), hacer buen uso de la lógica (que en sentido estoico se entiende como cualquier muestra del uso de la razón), y considerar la ética estoica, que tiene un significado especial también, pues considera no sólo distinguir entre el bien y el mal y obrar con bien, sino también el vivir una vida acorde a nuestra naturaleza de manera virtuosa, es decir, vivir una vida excelente en su completo potencial y cómo lo dicta el orden natural de las cosas, siguiendo nuestro impulso hacia la auto preservación en todo momento.

Sabemos que no hay que entregarse al pánico, ya que el pánico nos conduce siempre a actuar irracionalmente, y nuestra razón es nuestra más grande aliada para poder determinar si algo nos hace bien o nos hace mal, sin embargo vale la pena tomar las debidas precauciones, es decir hacer uso de la virtud estoica de la templanza; hacer lo necesario de acuerdo a las circunstancias, sin llegar a sobreestimarlas y ni tampoco a subestimarlas.

Esto quiere decir, en el caso del coronavirus, seguir las recomendaciones dadas por las autoridades de la salud, como evitar salir excepto para lo necesario, lavarse las manos continuamente, evitar saludos de mano, hidratarnos, etc., hacer todo esto, mientras se tiene la noción de que en la vida los factores externos juegan un rol muy importante y no todo siempre sale cómo queremos aunque hagamos nuestro mejor esfuerzo.


Es de estoicos reconocer la realidad y aceptar que nuestro control sobre ella es limitado, así dejando fluir las cosas, como decía el gran Marco Aurelio en sus meditaciones, «Mire las plantas, gorriones, hormigas, arañas, abejas, todos ocupados con sus propias tareas, cada uno haciendo su parte hacia un orden mundial coherente”, esto quiere decir que habrá que aprender a resistir cuando las circunstancias nos son adversas y no intentar remediar lo irremediable, pero sin caer en la irresponsabilidad de dejar del lado lo que sí está en nuestras manos hacer para prevenir el contagio.

Y ¿por qué fijarnos en los estoicos? Porque su contribución a la filosofía ha sido importante para el desarrollo de toda civilización europea y sus colonias, y es un pilar en el cual descansa la identidad que llevamos todos los que, formamos parte del mundo hispano. Según el columnista JEREMY CLIFFE “La literatura y el teatro españoles veneran el desengaño, o la realización de la triste y dura verdad del mundo.” una idea bastante estoica que sin duda debe hacerse más presente en nuestra cultura hoy más que nunca ante la amenaza del coronavirus, y en nuestra vida en general, pues son ideas como éstas las que han hecho de las grandes civilizaciones lo que son.

Finalmente hay que mencionar un posible fallo en el que se puede incurrir cuando se toma el estoicismo como única filosofía, pues aunque la historia ha demostrado una y otra vez que estamos en lo correcto al tomar la física, la lógica y la ética estoicas para lidiar con los problemas del mundo, ante la precariedad laboral y preocupaciones sobre finanzas frente a las que nos vemos debido al covid19 y las cuales seguro se acentuarán luego de que éste haya pasado, no debemos poner el estoicismo en un enfoque en el cual sólo nos dejemos llevar viviendo bajo condiciones políticas con las que estamos en desacuerdo y simplemente dejar que así sea, pues aunque éste tiene un enfoque un poco insensible, sigue bajo nuestro control el argumentar fuertemente por un mejor sistema político, el convencer personas de que no estamos en el sistema ideal.

El estoicismo se trata más de su sentido de sí mismo que de ignorar o aceptar cualquier injusticia en el mundo; acerca de dibujar una línea más clara entre las cosas en las que puedes concentrarte y las cosas en las que no puedes concentrarte

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4 de julio hispano