El eje bolivariano

Cuando Diosdado Cabello amenazó a finales de 2019 que la “brisa bolivariana que recorre la región” podría convertirse en “huracán” -refiriéndose a la ola de disturbios que estallaban al unísono en las capitales sudamericanas-, las democracias liberales del continente no advirtieron la dimensión de sus palabras. Sus líderes, cegados por la ilusión de gobernabilidad y abundancia económica, pensaron que no había ninguna lección que tomar en cuenta de la satrapía venezolana, un país arruinado y deslegitimado internacionalmente.

Tan solo unos meses después, la pandemia del covid-19 enrostró una verdad incómoda a los países que habían convertido en culto el libre mercado y en pecado mortal las ayudas sociales y la idea de Estado. A diferencia de las democracias maduras del primer mundo, el endeble andamiaje político e institucional letrinoamericano quedó impotente cuando el hambre y la enfermedad tomaron las formas grotescas que hemos sufrido tanto en 2020 como lo que va del 2021. Con el sistema golpeado, las “brisas bolivarianas” soplaron a favor de los radicales, convirtiéndolos en opciones electorales atractivas -a pesar de su marginalidad inicial-, en una rima muy parecida a la crisis del 29 que aupó a los nacionalsocialistas y sus acólitos en la Europa de entreguerras.

Como he señalado en artículos previos -citando a expertos en geopolítica y relaciones internacionales-, el Perú tiene una posición central decisiva en América del Sur. Como el último bastión del imperio español durante las guerras separatistas, las juntas rebeldes de las repúblicas vecinas tuvieron que hacerle la guerra y vencerlo para poder consolidar sus independencias. Un fenómeno similar viene ocurriendo dos siglos después de la revolución encabezada por San Martín y Bolívar -que contribuyó con el desmembramiento geoestratégico de Hispanoamérica-, aunque exacerbada por el neomarxismo demencial que lidera el eje castro-chavista y auspicia el narcotráfico.

Sin embargo, antes de apuntar a Caracas y La Habana, es La Paz -y todo lo que ahí se cuece- lo que nos debería mantener en alerta a los peruanos que no queremos ceder ni un centímetro de nuestro suelo a los sátrapas de la “Patria Grande”. El socialismo del siglo XXI, en términos geopolíticos, no es más que una rima del bolivarianismo, esa ideología hortera que idolatra al caudillo vil que nos “liberó” de España y a cambio quiso repartir el Perú entre sus edecanes.

Así, el cocalero Evo Morales -quien manda en Bolivia, no Arce- se reunió con Pedro “Sombrero Luminoso” Castillo para comprometer al Perú en su proyecto “América Plurinacional”, un plan impulsado por movimientos indígenas, sociales e intelectuales trasnochados desde el foro Runasur, una iniciativa del líder aimara para imponer su proyecto político en todo el continente.

Morales ha estado muy pendiente del Perú, incluso antes de que Castillo ganara las elecciones. No son pocos los desconfiados que advierten que algo de dinero, o por lo menos asesoría política, salió de los cuarteles del MAS para apoyar a la agrupación de su camarada Vladimir Cerrón, el “poder en la sombra” detrás del monigote del sombrero chotano.

Así, Morales no solo ha gozado escolta policial gracias al auspicio de Héctor Béjar -exguerrillero vinculado a los servicios de inteligencia cubanos que debió renunciar al cargo de ministro de Relaciones Exteriores por asegurar que la Marina de Guerra “inició el terrorismo”-, se ha reunido con gremios de profesores y cocaleros, asegurando a estos últimos que impulsará el Consejo Andino de la Coca “para hacer la revolución democrática en Perú”.

“Busca que se copie el modelo de Bolivia, la expansión política en el sur del Perú, por eso busca dicha pluralización. Eso explica su interés en el gas y las frecuentes visitas a gobernadores al sur, donde ha establecido lazos muy negativos. Morales realiza estas propuestas porque se considera un abanderado del socialismo del Siglo XXI y ha visto que puede colonizar el Perú ideológicamente”, advirtió en una entrevista a Perú 21 el diplomático Eduardo Ponce, ex vicecanciller.

Volvamos a Runasur, su novísima plataforma. Runasur nace de la conjugación del vocablo quechua runa, que significa persona o ser humano, con Unasur (Unión de Naciones Suramericanas). Morales la ha definido como un “mecanismo de integración plurinacional entre los pueblos indígenas, afrodescendientes, organizaciones sociales, sindicales, territoriales y movimientos sociales de la región”.

Aunque este foro ha terminado por cuajar a finales de abril de este año, su origen se remonta al “Encuentro de los Pueblos y Organizaciones del Abya Yala hacia la construcción de una América Plurinacional”, realizado entre el 18 y 19 de diciembre de 2020 en la localidad de San Benito, en el departamento de Cochabamba, Bolivia, y que contó con la participación de al menos 1000 invitados internacionales.

De acuerdo a Telesur, en el encuentro se discutieron acciones para reimpulsar el proyecto de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), así como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) y la Unasur.

Por su parte, Evo Morales manifestó que “los pueblos originarios y las organizaciones del Abya Yala proponemos asambleas constituyentes para Estados Plurinacionales que expresen la diversidad de las identidades culturales, la convivencia armónica con la Madre Tierra y la reconstitución de la sabiduría ancestral”.

Podemos deducir de todas estas maniobras que el eje bolivariano, como antaño, busca hacerse con el Perú para lucrar a costa de los imbéciles, desprevenidos e indiferentes; eso sí, con la venia de los advenedizos. Ante un escenario como tal, no queda otra opción más que “soplar” en contra.

Ver:

[1] https://runasur.org/

[2] https://www.nodal.am/2021/04/impulsada-por-evo-morales-nace-runasur-la-unasur-de-los-pueblos/

[3] https://www.telam.com.ar/notas/202105/552685-impulsado-por-evo-morales-nace-runasur-un-foro-de-integracion-para-una-america-plurinacional.html

[4] https://peru21.pe/politica/evo-morales-busca-instaurar-el-proyecto-runasur-en-el-peru-evo-morales-pedro-castillo-bolivia-runasur-eduardo-ponce-carlos-valverde-noticia/?ref=p21r

[5] https://www.lanacion.com.ar/el-mundo/que-dice-el-decalogo-de-runasur-la-nueva-alianza-de-evo-morales-que-cuenta-con-apoyo-de-la-argentina-nid03082021/

[6] https://mundo.sputniknews.com/20210521/runasur-nace-una-unasur-de-los-pueblos-con-4-paises-de-que-se-trata-1112395948.html

[7] https://mundo.sputniknews.com/20210814/runasur-la-unasur-de-los-pueblos–1115075313.html

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